Dentro y fuera del país ocurre el robo de identidad en los burós de crédito. Esto te puede traer dificultades como usuario bancario, sobre todo en el estatus de tus préstamos. Entonces, presta atención a nuestros consejos para evitar malos ratos.
Debemos empezar por informarte qué son los burós de créditos. Estas son organizaciones que se encargan de la recopilación, procesamiento e intercambio de información acerca del historial crediticio de una persona física o moral.
Es decir, desde el momento en que sacas un préstamo con un banco en República Dominicana, este envía esa información al buró. Asimismo ocurre con los pagos que efectúas, los cambios en las condiciones de ese crédito y los retrasos que tengas.
Los burós de crédito son el gran archivo donde se va registrando tu historial crediticio o historial de crédito. Es el que consultan las entidades bancarias para saber:
- Cantidad de préstamos vigentes y saldados
- Regularidad de tus pagos
- Incumplimiento o impagos en los que has incurrido
- Estatus legal de tus endeudamientos
Con esta información, las entidades financieras, siempre que solicites un crédito, pueden analizar tu seriedad y responsabilidad como pagador.
De allí emiten una decisión: aprueban o niegan el crédito. Pero estas decisiones no las toma el buró, este solo entrega la información crediticia… Atención: cuando tú lo autorizas.
Riesgos del robo de identidad en el buró de crédito
Una persona podría robar tus datos en el buró con el objeto de conseguir una referencia favorable para ella o, peor, un crédito.
En consecuencia, lo que haga posteriormente esa persona con ese préstamo afecta tu reputación dentro del sistema financiero.
Por ejemplo, si la persona deja de pagar, aparecerá una mancha en tu registro. De modo que cuando solicites un crédito, te lo pueden negar o ponerte una tasa de interés elevada porque representas un riesgo.
También puede tener repercusiones no solo bancarias, pues, en la actualidad también se consultan los burós de crédito para el otorgamiento de visas o de empleos. Así que podrías quedarte sin esos beneficios, solo porque alguien está usurpando tu identidad.
Que te nieguen un préstamo, un mejor trabajo o el viaje de tus sueños no es agradable. Peor aún, imagina que tuviste problemas con un crédito, debido a una emergencia de salud. Luego hiciste grandes sacrificios para pagar y recuperar un buen score crediticio; pero que ahora venga alguien, de la nada, a dañar tu imagen. ¡Es muy injusto!
¿Cómo verifico mi información?
Los burós de crédito que funcionan en República Dominicana son TransUnion y Datacrédito. A ellos les puedes solicitar tu historial de crédito de manera gratuita siempre que lo hagas en un lapso no menor de tres meses en un año. Es decir, tienes derecho a sacar cuatro veces ese reporte gratis en esos 12 meses.
Una vez que lo tengas, debes verificar cuidadosamente si hay otros créditos adicionales a los que realmente tienes. De ser así, debes notificar de inmediato al buró de crédito.
La ley 288-05 es la que regula a las sociedades de información crediticia en el país. Este instrumento legal indica que debes informar al buró de la irregularidad. Este tiene un plazo de 15 días hábiles para informar al banco.
La entidad financiera, a su vez, tiene 30 días hábiles para responder al reclamo. En ese tiempo el préstamo aparecerá con la etiqueta de “Registro Impugnado”. Si pasado ese lapso, el banco no responde; la sociedad de información crediticia automáticamente hará la corrección que pide el usuario.
Si el banco, por el contrario, objeta la reclamación del cliente, comienza un proceso de reclamación directo ante el banco. Y el buró de crédito solo podrá cambiar la información cuando haya una sentencia firme de una instancia autorizada.
Además de la usurpación de identidad, se puede dar el caso de que una entidad bancaria te abra un préstamo, generalmente tarjetas de crédito, sin tu pleno conocimiento. Por eso también es útil la revisión continua de tu historial.
Sanción para los ladrones de identidad
Es importante recordar que la ley 288-05 establece una penalidad, según su artículo 47, de 20 a 100 salarios mínimos para toda persona física que haya “accesado de manera fraudulenta, a la base de datos de un BIC (buró de crédito) para obtener y utilizar cualquier tipo de reporte proveniente de un BIC, utilizando claves de acceso que no le pertenecen”.
También es importante recordarte que no todo el mundo puede tener acceso a tu historial. La ley establece que hay de tu parte una “manifestación expresa del consentimiento” de revisión cuando pautas con un banco “el otorgamiento de un crédito, la prestación de un servicio o la realización de cualquier actividad que genere una relación jurídica entre el consumidor y el usuario suscriptor”.
Empero, para que una empresa, un consulado, institución educativa o alguna otra entidad no bancaria (y que no pertenezca al Estado) tenga acceso a tu historial lo debes autorizar expresamente; de lo contrario, es ilegal.
Así que la lección es muy sencilla: revisa periódicamente tus datos en el buró de crédito. No querrás que tus esfuerzos sean aprovechados por otros. Cuida tu información.